El Círculo Flamenco de Madrid programa un cineforum y un recital de cante con los hermanos Juan e Inés Bacán
La estancia de #losBacánenMadrid comenzó con un cineforum organizado por el Círculo Flamenco de Madrid en la Cineteca, ubicada en el edificio del antiguo Matadero, donde hace más de 50 años el propio Juan Bacán, carnicero antes que cantaor, se presentó a las oposiciones públicas para ocupar una plaza en lo que ahora es un Centro de Creación Contemporánea. Los Bacán también han dado el salto de la creación hasta nuestros días.
En el cineforum se proyectaron las películas de la directora Carole Fierz Inés, ma soeur y Fiesta Gitana con los Pinini, con un coloquio posterior moderado por Javier Azcutia (del Círculo Flamenco de Madrid) que propició el encuentro entre la directora francesa y la protagonista Inés Bacán, dos mujeres que se aprecian pero que se tratan poco desde el fallecimiento en el año 1997 por accidente de tráfico del músico internacional Pedro Bacán que las unía familiarmente y también profesionalmente a través del flamenco.
La primera de las películas es un retrato intimista de la relación fraternal entre Pedro e Inés Bacán en los primeros momentos en los que la cantaora sube a los escenarios. El filme refleja la relación tan estrecha y especial entre dos personas que “salen del mismo seno” y el descubrimiento y asombro de Pedro Bacán, que lleva a su hermana a iniciar una carrera profesional que continúa hasta la fecha. La segunda es un derroche de arte en una fiesta gitana, en la que la cámara se sitúa en el interior del ambiente festero y capta los códigos familiares y artísticos, con un resultado inédito alrededor de la figura de Pedro Bacán y la familia de Los Pinini.
Y como no hay encuentro sin cante, el Círculo Flamenco de Madrid programó para el día siguiente, el jueves 24 de abril, un recital de Juan Bacán en el Teatro Flamenco. Los artistas lebrijanos viajaron a Madrid acompañados del guitarrista Antonio Moya, que abre el recital presentando una taranta de creación propia.
El Círculo Flamenco de Madrid sabe lo que hace en sus programaciones y presenta el recital en el contexto de los gitanos flamencos de la baja Andalucía. Juan Bacán es cantaor esencial, de voz tosca y profunda, que arremete los cantes de manera instintiva, basándose en la memoria familiar. Como decía su hermano Pedro Bacán: “el cante es la raíz de todo, es lo que da forma al universo flamenco”.
Juan empieza por soleá al golpe, acompañado únicamente de los nudillos y tirando de letras remotas: “El sitio donde te hablé, ganas me dan de volverme y sentarme un ratito en él”. Le coge bien, recorta los sonidos y se deja llevar por los jaleos de su compadre. El compás y la pausa. El cante y los silencios. Continúa con sello de la casa de los Pininis por fandangos por soleá. Estos cantes se deben escuchar poco por los madriles y Juan Bacán saluda desde el escenario a sus amistades sintiéndose orgulloso de cantar en Madrid.
Un poquito por bulerías. Sin aspavientos ni filigranas. El compás por excelencia. Juan sigue sentado en el escenario como si estuviera en el porche de su casa. Otra tanda de soleares. La guitarra brilla recordando la estrella que los guía. Juan se crece en confianza para la seguiriya, pausa el tiempo y masca el cante. Charlan sobre el escenario, improvisan y se despiden por bulerías “antes de que entre mi hermana”. El broche de oro lo pone Inés Bacán con la nana de los luceros que estremece el aire. Con un mano a mano por tonás entre los hermanos, el universo de los Bacán se queda detenido en la noche madrileña.