Las puertas de La Choza de Juaniquín continúan abiertas para amigos y aficionados en El Cuervo

El acto de apertura reivindica también la historia del «hijo perdío» de Juaniquín, que se dedicó a enseñar por los cortijos

Con un Padre Nuestro (Juaniquín que estás en los cielos) se abrían las puertas de La Choza y daba comienzo el V Ciclo Flamenco de El Cuervo, reivindicando la figura de Juaniquín como cantaor, como persona y como libertario: «discreto, sincero, consecuente, sencillo, humilde, amigo de sus amigos, generoso», la antorcha que ha iluminado la verdad en el cante y que continúa ardiendo, más aún si cabe desde que el Ateneo Arbonaida está llevano a cabo un trabajo impresionante por recuperar su figura.

Flamenco

V Ciclo Flamenco La Choza de Juaniquín en El Cuervo 2017

La Choza de Juaniquín, situada en cualquier lugar entre Lebrija, Jerez y El Cuervo, se convirtió en lugar de peregrinación y de culto de los mejores cantaores de la época. Siempre tenía una sontira y un comentario ingenioso. Cuando Juaniqín llegaba, se corría la voz, y aparecían jóvenes, niños y adultos solo para escucharlo cantar.

Los familiares y descendientes de Juaniquín son los más motivados para desempolvar la historia de este gitano «creador de letras y músicas que nunca fueron grabadas» pero que no murieron con su persona, sino que han llegado a nosotros gracias a la transmisión del cante flamenco de generación en generación. Nietos, bisnietos y tataranietos repartidos por Los Palacios, Lebrija, El Cuervo y Sanlúcar (entre otros su tataranieta Lucía Caballero Pérez) participaron en un acto muy emotivo que demuestra que «murió el hombre, pero no su cante» y que el hombre también seguirá vivo mientras haya alguien que un día cante una soleá «y tú sientas la agonía de contarlo, sientas que tú también estuviste en la Choza de Juaniquín».

Juaniquín tuvo un hijo al que dió por muerto, «su hijo perdío», al que le sacó una letra por soleá. Este hijo sobrevivió a un pelotón de fusilamiento durante la Guerra Civil, tras la cual se cambió de nombre y sufrió la persecución de regimen. Este hijo, Casto Moreno o José Vargas, se dedicó a enseñar a los niños de los cortijos a leer y a escribir, y a hablarle a los mayores de libertad. El lebrijano Ramón Vargas «bebió de su manantial, que me marcó para el resto de mi vida» y explicó en El Cuervo los avatares de la vida del hijo de Juaniquín. Para Ramón Vargas, la vida del enseñador José Vargas fue tan trascendental como la del padre: «ejercía de maestro de forma altruista, se desterró a los cortijos, al campo, pero nunca se pasó al bando de los vencedores de la guerra».

Los integrantes del Ateneo Arbonaida reclaman el espacio de Juaniquín y de El Cuervo en la órbita de lo jondo. Gonzalo Amarillo explica que tienen «un compromiso firme a la hora de conocer la figura de Juaniquín» y la autenticidad del flamenco «como filosofía de vida».

Tras el acto de apertura se celebró una mesa redonda donde se habló de los datos de la vida de Juaniquí, pero también de su legado y de su lugar en el cante flamenco.

GENIO Y FIGURA: Homenaje a Miguel Funi en el Potaje Gitano de Utrera 2017

El artista Miguel Funi, claro exponente de una época flamenca, recibió el homenaje de su segundo pueblo

Miguel Funi representa a toda una época del flamenco, precisamente la época dorada; aquella en que las grandes figuras coincidían en los escenarios y se disputaban de manera sana la primera línea del cante. Miguel Funi unca tuvo ese problema: él era único, especial. Su figura pasará a la historia del flamenco sin polémica ni cuestionamientos. El cantaor que se baila, el baolaor que se canta: Funi es flamenco desde que se levanta hasta que se acuesta y pertence, por tanto, a la columna que sostiene todo este tinglado en lo que se ha convertido en la actualidad este arte.

Y para muestra un botón. Aquí os dejamos unas imágenes del homenaje que le otorgó a Miguel Funi la Hermandad de los Gitanos y el pueblo de Utrera en la LXI edición del Potaje Gitano:

Tanto la Hermandad de los Gitanos como el Ayuntamiento de Utrera, como el periodista Manuel Bohórquez que desglosó la figura de Funi, coicicieron en destacar la talla del homenajeado. Una vez más, el Potaje opta por hacer homenaje a los cabales, dejando atrás una etapa de figuras más mediáticas, pero más alejadas del flamenco. Imágenes del Homaneje:

En esta serie de fotografías, todas las personas y artistas qque acompañaron a Miguel Funi en su homenaje:

RECITAL FLAMENCO de José Valencia en Las Cabezas de San Juan

ÁLBUM DE FOTOS y AUDIO_escucha los tientos – tangos del cantaor lebrijano acompañado por la guitarra de Juan Requena

José Valencia ofrecerá, dentro del circuito «La escena encendida» de la Diputación Provincial de Sevilla, una serie de recitales de flamenco de formato accesible para todos los públicos, con el rigor de su cante y la magia de las noches de verano. Como ocurrió en Las Cabezas de San Juan, acompañado de la guitarra de Juan Requena, José Valencia desgranó «los palos de su voz» mientras se apagaba el día, o mientras se encendía la noche mejor dicho, en un recital exquisito e impecable, solo para disfrutarlo.

Empezó por malagueñas para desembocar en el palo estrella del compás, soleá por bulerías; los tientos – tangos que abajo reproducimos son un glosario de letritas de antaño; las alegrías o cantiñas de una tierra más marismeña que salada y sentó de nuevo cátedra por seguiriyas. Ya entrada la noche pudimos disfrutar de unas bulerías que terminaron por compás de Lebrija, al que Juan Requena acompañó a las palmas. Una maravilla.

Os dejamos un álbum de fotos de cómo se nos vino la noche sin darnos cuenta, y un regalo para los oídos, los tientos – tangos de José Valencia acompañado de Juan Requena.