La Roda del Viento de DORANTES abre el año dedicado a la conmemoración del V Centenario de Elio Antonio de Nebrija
El pueblo de Lebrija ha iniciado los actos conmemorativos del V Centenario de la muerte de Elio Antonio de Nebrija que se celebrarán durante el año “2022. Año Cultural Nebrija” con el objeto de resaltar la figura del ilustre humanista autor de la primera gramática en castellano.
El lebrijano Dorantes fue el encargado, el pasado viernes 1 de octubre, de la descarga de artillería que anunciaba la salida de las naves rumbo al Año Cultural del quinto centenario. Su concierto de piano flamenco, con orquesta y coral, La Roda del Viento, conmemora a su vez otro quinto centenario, al coincidir en el año 1522 la muerte de Elio Antonio con la llegada a Sevilla de la única nave que sobrevivió a la aventura de llevar a cabo la primera vuelta al mundo de Magallanes y Elcano.
Un concierto en pleno centro urbano con una Plaza de España abarrotada de gente en el que Dorantes se hizo acompañar de los músicos de la Orquesta Bética de Sevilla y de una Coral Flamenca encargada de recitar los momentos más épicos de la singular aventura.
El lenguaje flamenco de Dorantes se encarga de narrar el intrépido viaje y va adaptando los distintos palos y compases al devenir de tan osado acontecimiento que marcó una época y dio lugar al inicio de la globalización. Dorantes lanza sus naves al agua y hacen el mismo recorrido que hicieran los marineros allá por el siglo XVI. El músico consigue transmitir los momentos de entusiasmo y buenos presagios, cuando los barcos salen de Sevilla, pasan junto a Lebrija por el Guadalquivir y cargan en Sanlúcar de Barrameda a ritmo de tanguillos gaditanos.
Cruzan el Atlántico por sendero ya transitado y bajan la costa brasileña buscando el Mar del Sur que los llevará a lo desconocido. Incertidumbre y desconcierto que tienen un momento culmen con la seguiriya que describe el hambre y las penurias que se alargan durante cuatro largos meses a lo largo del Pacífico sin tocar tierra antes de llegar a las Islas Filipinas. El encuentro con los nativos no siempre es amistoso y Magallanes pierde la vida en una de esas disputas.
En la clausura de la Bienal de 2018, en el Puerto de Sevilla, se pudieron oler las especias del oriente lejano. En Lebrija, el público estaba impaciente por el éxito de la llegada y Dorantes toca hasta dos veces el desenlace final. Lebrija está celebrando también el fin de una larga y penosa travesía con la llegada por fin de los acontecimientos masivos. Y como no hay conmemoración sin himno, la plaza pide a gritos el Orobroy que Dorantes ofrece con la generosidad que siempre derrocha como un gracias a la vida. La maestría de Dorantes ha servido para llenar de buenos augurios el comienzo del Año Cultural de Nebrija 2022.
REPORTAJE DE FOTOS de La Roda del Viento en Lebrija
Sublime travesía de sonidos que nos son comunes, los de la vida de cualquiera de nosotros, los de la alegría de partir, los de la soledad y el desamparo, los de la resignación y el desenlace definitivo.
Qué es la vida sino un viaje irresoluto.