ENTREVISTA A ÁLVARO ROMERO, que nos habla de “el poeta del sol y de los trigos” en el Día Mundial del Flamenco
El profesor y periodista Álvaro Romero visita Lebrija con motivo del Día Mundial del Flamenco. Viene a hablarnos del poeta Miguel Hernández, ahora que se cumplen 75 años de su muerte.
Álvaro Romero: Vengo a celebrar su vida, porque Miguel Hernández se ha mantenido vivo durante estos 75 años a través de su obra y también en la memoria de la gente. Es un poeta muy popular.
LebrijaFlamenca.com: ¿Cómo definiría al poeta? Ha titulado su charla como “el poeta del sol y de los trigos”. También le cantó como ninguno a los olivares…
Álvaro Romero: Se trata de una frase que Miguel Hernández dejó escrita en las paredes de la enfermería, en los últimos días que pasó allí. Es como una despedida, quiso despedirse así de sus amigos, evocando el trigo y el sol. Yo he cogido la frase porque es verdad que creo que lo define, como la frase de Machado: “Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla, y un huerto claro donde madura el limonero”. Esta frase me ha parecido que representa a Miguel Hernández.
LebrijaFlamenca.com: ¿Dónde ubicamos a Miguel Hernández? ¿En qué momento de la poesía o la literatura española?
Álvaro Romero: La vida de Miguel Hernández tiene una particularidad. Fue muy intensa y muy corta. Miguel Hernández pasó por cuatro etapas en un periodo de escritura de 8 años. No pertenece a ninguna generación, porque cuando empezó a escribir muy joven los poetas de la Generación del 27 eran mayores que él y estaban en un momento muy maduro. Cuando pasó la guerra murió antes de identificarse con ningún movimiento literario.
LebrijaFlamenca.com: A grandes rasgos, ¿cuáles fueron esas cuatro etapas?
Álvaro Romero: La primera etapa es ésta que te digo de su juventud, en la que coquetea con el 27 pero es demasiado joven como para pertenecer a la generación. Después tiene una segunda etapa amorosa, en la que escribe en enero del 36 el libro El rayo que no cesa. Yo situaría la tercera etapa durante la guerra, es su poesía más social y comprometida, con Viento del Pueblo y El hombre acecha. En esta etapa le canta a la miseria y se convierte en el poeta del pueblo. Y por último, una cuarta etapa más íntima en la que escribe el Cancionero y Romancero de Ausencias desde la cárcel.
LebrijaFlamenca.com: ¿Qué relación tiene la poesía de Miguel Hernández con el flamenco?
Álvaro Romero: Desde Morente a Poveda, los flamencos le han cantado a Miguel hernández. Manuel gerena, carmen Linares, camarón… Yo creo que existe una concomitancia natural entre el grito y el desgarro social de la poesía de Miguel Hernández y el flamenco. Miguel Hernández es el poeta del desgarro y de la pena. Durante los años 60 y 70 le han cantado con una complicidad enorme.