La Guarida del Ángel se convierte en TABLAO DE TANGO con Inés Bacán como artista invitada
¿Quién no se ha emocionado alguna vez con alguno de los tangos clásicos nacidos en el Río de la Plata? Una música sensible apta para aquellas personas que en algún momento de sus vidas han sentido rabia o tristeza. Algo parecido al flamenco.
El tango más primitivo y el flamenco originario cantan la pena amarga o sensible, se casan con el trago de vino y atienden al compás despacio, parando el tiempo. Así lo demostraron los tres músicos solistas argentinos que visitaron La Guarida del Ángel en Jerez de la Frontera el pasado viernes 10 de noviembre, con la cantaora lebrijana Inés Bacán como artista invitada.
Tres figuras de élite “que hacen vivir este género de forma única, tres solistas alrededor de una mesita y a media luz”: la voz de “El Chino” Laborde, la armónica de Franco Luciani y la guitarra de Raul Kiokio.
Fruto de “una coincidencia hermosa” presentaron los músicos argentinos a su artista invitada Inés Bacán, que entonó para el público la canción de “Los ejes de mi carreta” del cantautor argentino Atahualpa Yupanki con la cadencia de los gitanos errantes. La cantaora con voz majestuosa imprime autoridad al concierto y se acopla a la armónica gran naturalidad. Todos, músicos y público, se quedan con ganas de más y reclaman un martinete para terminar de sentar el germen del cante.
Después siguieron tangos más y menos conocidos, milongas y otros cantes primitivos, anteriores o familia del tango, que evidencian la riqueza musical de la tierra hermana al otro lado del Atlántico.