ENTREVISTA a Manuel Valencia: “Tratamos de crear conciencia a través de la música, que llega un poco más que las palabras”

Manuel Valencia es responsable de las percusiones corporales en el disco que Rycardo Moreno le dedica #aGaleano

La Sonikete Band lleva el compás en las venas. Son entre ellos primos más o menos cercanos, miembros de las familias cantaoras de Lebrija. Estos jóvenes se conocen desde los 3 ó 4 añitos y están escuchando cante desde que habitaban en el vientre de sus mamás. Manuel Valencia es el que tiene mayor experiencia profesional en la percusión. De la mano de su hermano José Valencia y de Rycardo Moreno, entre otros artistas, ha participado en múltiples espectáculos y grabaciones.

LebrijaFlamenca.com: Dice Rycardo Moreno que se reúne de un grupo de artistas que estáis en la misma frecuencia, ¿qué entiendes por estar en la misma frecuencia?

Flamenco

#aGaleano de Rycardo Moreno – Entrevista a Manuel Valencia

Manuel Valencia: Entiendo por la misma frecuencia que estamos en la misma onda musical. Lo mismo musical que personal, que en las cosas cotidianas de la vida, lo entendemos todo prácticamente igual. Entonces, lo que él intenta decirnos, los demás lo entendemos a la primera. En este disco, Rycardo se ha rodeado de su gente, de los que hemos estado siempre a la vera de él, todos los que nos juntamos desde chicos. A día de hoy, ya son 30 años, somos como hermanos o lo más parecido.

Rycardo se ha rodeado de gente que lo quiere. porque yo creo que en este disco, se trata de tener cerca a gente comprometida y que entienda lo que él está mostrando con el disco.

LebrijaFlamenca.com: ¿De qué parte del disco te sientes tú más responsable?

Manuel Valencia: Este disco lleva percusiones corporales, las hemos hecho con los pies, con las manos e, incluso, con las barbas. Con golpes en el pecho, buscándonos los sonidos más graves, más oscuros. Lo más improtante que lleva el disco, al ser un disco de guitarra y voz, son las palmas… y de eso es de lo que yo me he encargado, donde he estado un poco más presente, en ver cómo íbamos a enfocar cada tema.

LebrijaFlamenca.com: Parece que hay mucho de los sonidos de América Latina…

Manuel Valencia: En América Latina se utilizan muchos las percusiones corporales, con las manos y demás partes del cuerpo. Al ser un disco dedicado a Galeano, de Uruguay, de alguna manera hay que traerse algo de aquello para acá… Yo creo que cada tema tiene ese sonido latino, no vamos a entender  por sonido latino el ritmo salsero, sino mucho sonido de las raíces latinas y de lo mal que se ha pasado allí, con las guerras y todo eso.

LebrijaFlamenca.com: ¿Qué habéis querido transmitir con la “Oda a Alepo” que está en el disco como unas bulerías?

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#aGaleano de Rycardo Moreno – Entrevista a Manuel Valencia

Manuel Valencia: Se trata de hacerle un poco a la gente que entre en conciencia por lo que está pasando ahora en el mundo, con los refugiados sirios. Por ejemplo, se habla mucho de que Trump ha ganado las elecciones y del muro que quiere construir, pero no hablamos del muro que ya hemos construido aquí en Europa… les tenemos la frontera cerrada. Hoy mismo en las noticias se hablaba de que España había firmado un convenio para traer a 16 ó 17 mil refugiados, y a día de hoy solo lleva unos 1.100 y sigue cerrándole la puerta todavía a los sirios. Se trata de concienciar a la población de qué es lo que está pasando allí. El estribillo dice “no quiero morirme nunca, quiero jugar siempre”, es lo que querría cualquier niño, los hijos de nosotros por ejemplo, quieren jugar y nada más, no quieren verse envueltos en una guerra por culpa de los políticos. Entonces, crear un poco de conciencia por medio de la música que parece que llega un poco más que las palabras solas.

LebrijaFlamenca.com: ¿Con qué efectos habéis intentado transmitir esto que cuentas?

Manuel Valencia: Pues mira, con cosas cotidianas. Nos hemos metido en una obra, lanzando piedras, hierros sobre los escombros, hemos utilizado a mi niña con unos amigos para que simulen las voces de los niños cuando cae una bomba. Gritos de nosotros, porrazos, un poco de percusión pero de golpes sin ritmo ni nada. Para que la gente escuche lo que puede llegar a pasar un niño y la mayoría de los que somos padres o tenemos sobrinos, miremos las caras de ellos y miremos las caras de esos refugiados y veamos lo mal que lo están pasando y que lo pueden llegar a pasar nuestros hijos el día de mañana, nos puede tocar a nosotros el día de mañana.

LebrijaFlamenca.com: ¿Y el soniquete de Lebrija cómo ha entrado en el disco?

Manuel Valencia: Bueno, pues eso estaba claro que tenía que pasar. Donde hay una bulería y estando Rycardo, estaba claro que tenía que estar la Sonikete Band, como él  nos puso de nombre. Y teníamos que guardar un sitito para que entraran todos los niños. Luis ha grabado incluso unos pies… nos lo hemos pasado muy bien en esta bulería. Este rollo, esta energía que tenemos entre todos, que nos queremos, es lo que está reflejado en ese tema. Ese soniquete nace del cariño que tenemos entre nosotros.

La entrevista se desarrolla en la Tetería Andauní de Lebrija. La conversación se anima, empiezan a intervenir todos (Luis Carrasco, José Carrasco, David Vargas, Antonio Carrasco el Maleno y José Vargas Moreno) y todos hablan de lo mismo. Del cariño, de la conexión con Rycardo Moreno: “él nos dice para dónde va y nosotros lo entendemos, hemos llegado a un punto que sabemos darle lo que él quiere”. Se trata de aprovechar el momento cuando surge la locura. Están relajados, de risas, y salta la chispa.

LebrijaFlamenca.com: ¿Cómo definirías el disco, hasta dónde ha llegado Rycardo en esta ocasión?

Manuel Valencia: A mí la verdad es que me ha sorprendido mucho. Yo sé la capacidad que tiene Rycardo y sé las locuras que pasan por su cabeza, porque en parte me considero de confianza de él. Y te digo que me ha sorprendido en todo, en la manera de ponerle música a esas letras de Galeano. Él ha buscado ese tipo de música que le pegaba a cada tema y lo ha conseguido. Cada tema tiene la armonía y el sentido rítmico que pertenece a cada microrelato de Galeano. Para mí es una locura, la verdad. Si lo llegas a entender y te metes bien en el disco, escuchas las letras, las armonías, te llega a conquistar seguro, te va a hacer reflexionar y te va a hacer ver la vida de otra manera, le das importancia a lo que verdaderamente tiene importancia. Para mí ha sido un vuelco, si ya el libro me lo da, con la música de Rycardo más todavía.

LebrijaFlamenca.com: ¿Qué crees que busca Rycardo en vosotros, esa complicidad, esa chispa?

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#aGaleano de Rycardo Moreno – Entrevista a Manuel Valencia

Manuel Vaencia: Nosotros no tenemos que buscar la conexión porque la tenemos de manera natural. Está en la piel de nosotros y nada más que nos tenemos que juntarnos. Por su trabajo, Rycardo es el que menos está con nosotros. Cuando estamos con Rycardo más alegría nos da, porque es con el que menos estamos. Y surge sola esa conexión, esa alegría. Siempre estamos en esa frecuencia. Igual que sabemos cuando uno está mal nada más que con mirarlo a la cara. Todo eso fluye y cuando se trata de música, fluye más todavía. Porque nosotros no somos profesionales, aunque yo un poco más. Y Rycardo yo creo que busca eso, la no profesionalidad.

LebrijaFlamenca.com: Eso es lo bueno de Rycardo, que avanza y avanza y, a la vez, siempre tira de atrás.

Manuel Valencia: Rycardo siempre. Tanto en “Varekay” como en este disco de Galeano, y puedo hablar de estos disco como parte mía, hemos buscado siempre eso. Lo espontáneo, ser nosotros y no buscar un sello que no tenemos. Buscar el sello de nosotros, esto es lo que somos y esto es Rycardo. Lo que ha sido siempre. Nuestro sello, Lebrija, la familiaridad de nosotros, el amiguismo, el amor que nos damos unos a otros, ese es el sello, no es más. Es bonito que después de tanto tiempo y después de codearse con los mejores profesionales, siempre vuelve.

Nosotros tenemos lo que hemos mamado y lo que hemos vivido en la casa de nosotros. Venimos de casas cantaoras, Malena, nieto de la chacha Pepa, hermano de José Valencia, sobrino de Manuel de Paula… tenemos la genética, entonces tampoco nos cuesta, nos sale de fomra natural. Es nuestra forma de vida, igual que respirar. Es lo mismo. Yo no veo mi vida sin esto.

Para nosotros el flamenco es una manera de relacionarse. Ninguno nos dedicamos a esto, pero siempre tenemos una letra o un cante en la cabeza. Aunque estemos trabajando… hacemos compás tan solo con estar apollado. Tenemos nuestros estudios, nuetras familias, pero esto es como forma de vida. Siempre estamos escuchando cantar.

Vuelve a animarse la conversación. Recuerdan esos encuentros y esas convivencias en las que fluye la música. En una boda las emociones son todavía más “porque ves gente que no ves hace mucho tiempo, aparte de la alegría de los novios, encontrarte con los mayores, es donde se puede escuchar el cante; en las bodas me digo, voy a escuchar a mi padre y lo pico un poquito para que cante, en las bodas se da esa oportunidad”.

Y se arrancan por palmas, como tantas veces:

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#aGaleano de Rycardo Moreno – Entrevista a Manuel Valencia

Sobre Araceli Pardal

Periodista. Vivo en Lebrija.
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